Si usted piensa que necesita trabajar menos horas y de manera más eficaz, en su próxima instalación, considere la opción de utilizar un mando a distancia. Con un mando a distancia mejorará su productividad sin aumentar el personal o las horas extras, ya que podrá evitar los continuos desplazamientos que tiene que hacer para comprobar el sistema de riego. Utilice los mandos a distancia para:
Instalación inicial: Una vez completada la instalación, con un mando a distancia puede ahorrar tiempo en las operaciones de purgado de tuberías y ajuste de aspersores, al evitar los desplazamientos al programador central, controle el programa desde el mando a distancia.
Prepárese para el Invierno: En climas fríos, hace que el proceso de vaciado de tuberías sea más cómodo. Con un mando a distancia desde un solo punto se realiza la operación, evitando tener que desplazarse al programador para ir introduciendo las horas de inicio, mientras que a continuación, aplicamos el aire.
Solución de problemas: Busque fugas, roturas o daños en los aspersores sin ir al programador para identificar el problema. El mando a distancia le permite activar y apagar rápidamente el sistema una vez que el problema está identificado. Gasta menos agua y ahorra tiempo realizando estos trabajos, Mejor eficiencia laboral y menores gastos de agua.
Riegos no programados: modificar los tiempos de inicio de riego sin cambiar el programa regular, es fácil con un mando a distancia. En jardines públicos, la flexibilidad para hacer riegos no-programados, como disminuir el polvo o regar zonas muy transitadas es muy apreciada por los encargados de riego.
Mejorando el acceso: Los programadores se suelen instalar en lugares poco accesibles como en sótanos o habitaciones cerradas, con un mando a distancia esto no es problema.
Visita final: haga una entrega de obra pulida, presentando su trabajo al propietario activando desde el terreno el riego, pudiendo responder preguntas y solucionar dudas. También le ofrece la oportunidad de vender un mando a distancia al dueño de la casa.
Reduzca las llamadas de consulta: Además de conseguir un ingreso extra con la venta del mando, evita llamadas de mantenimiento innecesarias. Cuando se activa una zona con un mando a distancia, el selector del programador no se mueve, lo que impide cambios en el programa. Muchas llamadas son el resultado de un cambio accidental del programa al intentar modificar los tiempos de funcionamiento del programador.
Hay muchos tipos de mandos a distancia. Algunos pueden ser muy asequibles para distancias cortas, por lo general menos de 300 m. Con más de 100 direcciones programables se pueden usar varios mandos a distancia en una misma zona. Los buenos mandos comerciales ofrecen las mismas funciones aunque a distancias más largas, pero cuestan un poco más.